Cuarzo Rosa: Trabaja sobre las energías asociadas al amor incondicional hacia otros seres y sobretodo hacia nosotros mismos. Además, atrae sensaciones de paz y ayuda a conciliar el sueño.
Pirita: Asociada a activar las energías que nos encausan hacia un pensamiento de prosperidad. Su energía positiva trabaja la mentalidad de escasez, ayudando a pensar fuera del standard y así buscar mejores oportunidades. Es ideal para ser usada en el trabajo, estudios o diversos proyectos.
Labradorita: Es una piedra de alta vibración espiritual y protectora. Suele disipar miedos e inseguridades. Fortalece la fe en nosotros mismos, calma la mente hiperactiva y activa la imaginación. A nivel físico, se dice que ayuda con la artritis, reumatismo o resfriados. Además, alivia el estrés y equilibra las hormonas.
Larimar: Ayuda a verbalizar los sentimientos, por lo que se le considera la piedra de la paz y el perdón. Armoniza todo el organismo y es apropiada para el sistema nervioso. Trabaja regulando las energías asociadas a la ansiedad. Aporta fortaleza al sistema inmune y aumenta las defensas.
Amatista: Conocido como el cristal de la espiritualidad. Ayuda al equilibrio emocional y abre los canales que conducen a la sabiduría. Es un transmutador de emociones, pues transforma las energías negativas de distintas situaciones o actitudes. Además, favorece la conexión mente-pensamiento.
Amatista: El cuarzo más poderoso. Conocida como un cristal de meditación, pues nos ayuda a conectar con el mundo espiritual y concentrarnos en él. Además, 'transmuta' energías negativas, evitando que nos afecten.
Cuarzo Rosa: Trabaja sobre las energías asociadas al amor incondicional hacia otros seres y sobretodo hacia nosotros mismos. Además, atrae sensaciones de paz y ayuda a conciliar el sueño.
Piedra Luna: La piedra de los nuevos comienzos. Alivia el estrés emocional y favorece un buen funcionamiento de los órganos reproductores femeninos. Además, es muy buena para las personas inquietas y se le asocia a todo tipo de amor.
Cornalina: La bautizamos como "La piedra de las Citas" debido a que equilibra nuestras emociones y aumenta la autoconfianza, permitiendo que proyectemos una gran seguridad hacia los demás y nos empoderemos en todos los aspectos de nuestras vidas. Además, atrae energías de alegría y optimismo, para que seamos más positivos y nos animemos a salir de nuestra zona de confort con más frecuencia.
Aguamarina: Sirve para curar angustias del corazón, controlar el ego y pacificar los pensamientos desequilibrados. Además, es ideal para el tratamiento de problemas psicológicos, como la depresión.
Piedra Luna: La piedra de los nuevos comienzos. Alivia el estrés emocional y favorece un buen funcionamiento de los órganos reproductores femeninos. Además, es muy buena para las personas inquietas y se le asocia a todo tipo de amor.
Ojo Turco: Es un amuleto de la cultura Turca que está destinado a proteger contra el mal de ojo. En su presentación azul, ofrece la protección contra el mal de ojo habitual, pero además se le vincula con el cielo. Simboliza la verdad.
*Imágenes referenciales. La forma y el color de cada piedra puede variar en cada anillo.
Amatista: Conocido como el cristal de la espiritualidad. Ayuda al equilibrio emocional y abre los canales que conducen a la sabiduría. Es un transmutador de emociones, pues transforma las energías negativas de distintas situaciones o actitudes. Además, favorece la conexión mente-pensamiento.
Ágata: Asociada a la protección y buena suerte. Brinda serenidad y ayuda a la concentración. Es ideal para las personas dispersas o que enfrentan sensaciones de angustia, pues favorece a la expresión de pensamientos y sentimientos. Además, reduce dolores en la garganta, cuello y hombros.
Amuleto de Abejita: Representa el orden y la prosperidad, amor, alegría y buena suerte. Además, tienen una conexión con la naturaleza y el reino animal.
Rodocrosita: Piedra que representa el amor desinteresado y la compasión. Además, imparte una actitud dinámica y positiva; es excelente para el corazón, enseñándole a asimilar los sentimientos dolorosos.
Larimar: Ayuda a verbalizar los sentimientos, por lo que se le considera la piedra de la paz y el perdón. Armoniza todo el organismo y es apropiada para el sistema nervioso. Trabaja regulando las energías asociadas a la ansiedad. Aporta fortaleza al sistema inmune y aumenta las defensas."
*IMÁGENES REFERENCIALES: Los colores y formas de las piedras pueden variar según cada pieza.